lunes, 15 de junio de 2015

Esperar De nuevo • Cuando al Amor se Juega • Discernimiento Pre visorio.

Espere tantas noches, soñé despierto tantas veces con esa luz de esperanza a que ocurriera verdaderamente, pero me cegué, olvide que mis sueños contigo no se hacen reales, solo están para hacerme más soñador, ese es la causa del nombre y el efecto son este tipo de situaciones.

Me habías pedido que no te dejara plantada, pues no lo hubiese hecho aun así tuviera que correr y llegar tarde, pero habría llegado, no puesto una excusa, esa es la diferencia entre tú y yo. Lo sé, no pusiste ninguna excusa y es eso mismo lo que más te agradezco, pues así tengo la liberalidad de creer que es por el tema de tus notas que otra vez debo esperar. Sea eso o no... Prefiero conformarme con ese pensamiento, me reconforta más que pensar en que sencillamente te diste cuenta de que no podrías seguir jugando conmigo dando el gran paso a esa cita.
Cita. Bueno, ese era mi término... El tuyo era solo bajonear.
Y se supone que debería sentirme agradecido de salir contigo solo porque tenías hambre. Yo sentía amor. ¿Eso también lo sirven en el Restaurante, verdad?

El cuestionamiento recurrente a esta hora de la madrugada es... ¿Por qué esa necesidad de buscar un corazón sólido donde solo hay niebla?
Tal vez porque no siempre fue así, recuerdo con mucho cariño quien eras y como eras. Me hice la idea de que podríamos establecer la comunicación nuevamente y que habría cierta madurez, fue una lástima haber hecho tanto arre
glo en la semana, haber cambiado puestos en el trabajo y poder tener jueves y viernes libre para un "dejémoslo para después".

Dime algo; ¿Sabes acaso cuando será después?
No. Por supuesto que no lo sabes, ni siquiera te has hecho la idea de lo que puede tardar para mí esa espera. Pueden pasar solo días que para mí serán semanas, pueden pasar semanas que los sentiré como meses, o sencillamente pueden pasar 9 años más de espera.
No tenía esto en mente cuando prometí esperarte a través del tiempo.

La primera vez que te vi pensé; Es indiferente, pero es guapísima, definitivamente tengo que conocerla, debo invitarla a salir.
En ese entonces eran solo pensamientos de un adolescente, no creí jamás en que esos pensamientos prevalecieran años después hasta hoy, justo a días de que se volviera casi-real. Y es injusto, no digo que haya tenido que pasar si o si, no estamos atados bajo ninguna ley que nos obliga a reunirnos para compartir una tarde, no estamos atados por nada, salvo lo que sentimos cada uno. Por ello es injusto, encuentro que es injusto para mi corazón, ni siquiera debería importarme mucho pues con esta ya sería la tercera vez que saldré a una cita contigo pero sin ti, o seria la cuarta, o quinta... Ya no tiene caso pensar en ello.

Supongo que es normal sentir remordimientos. No, no tengo rencor u odio, eso es de niños. Pero si siento remordimientos por haberte creído como un idiota, otra vez.
Lo que más lamento fue haberme confesado, no serias tú la que lamentaría haber preguntado, soy yo el que lamenta haber respondido honestamente, hubiese preferido mentirte. Si, hubiese preferido una mentira dulce que una verdad amarga, pues así es como me sabe ahora tu respuesta.

Lo bueno de todo es que ya siento muy poco como para que esto afecte en mis días y me deprima, puedo seguir normalmente porque sencillamente no ha cambiado nada en absoluto, toda mi realidad sigue igual y mis sueños siguen siendo sueños, solo lamento que tengas en conocimientos uno de mis sueños, tarde o temprano presiento que podrás usarlo contra mí; turismo emocional se hará presente y una vez más daré inicio a mi partida en el tablero de la derrota. No es que sea adivino pero así terminan siempre las cosas contigo de Reina y yo de simple Alfil.

No sé quién eres, veo a la chica de la fotografía, esa antigua foto de Niñangel con su mirada tierna, perdida e indiferente y con un rostro blanco como la hermosa nieve recién caída de madrugada, y te veo a ti, a la mujer de ahora y a tus palabras y no sé quién eres, no sé a qué juegas ni lo que piensas honestamente. Puedo deducir que conoces el amor, pero solo crees que el de tu pequeña es real por que te has quebrado del amor de un hombre, de cierta manera me quieres hacer culpable, o puede que no, puedo pensar lo que quiera, pues solo soy un sujeto al que le llamas solo cuando no estoy y le eres indiferente o interesante según tu estado de ánimo cuando hablamos.
Pero No seré tratado como basura por alguien que no sabe amar a las demás personas. Que en vez de ver el cariño solo ve lo que quiere ver para echar en cara su decepción superficial del mundo, generalizando.

Estoy consciente de que no cambiaras y tampoco espero que lo hagas.
Acepte eso porque al buscarte sabía que si te encontraba, en algún momento discutiríamos, pelearías contra mi e incluso me insultarías por capricho, ese genio tuyo estoy seguro que fue el responsable de que el padre de tu pequeña se marchara. 

No es casualidad que las palabras de mi padre se queden merodeando en mis pensamientos;
Papá estaba algo cansado y harto del comportamiento de mamá, me dijo que lo peor de una pareja era que una no fuese capaz de sentir ni piedad o misericordia por su contraparte y le tratara como más le complaciere, esa vida es un infierno porque estas ligado a vivir bajo discusiones inminentes, peleas que se desatan hasta por una broma mal entendida, con los años papá se volvió de un padre "chacotero y sonriente" a un padre silencioso y limitado de acciones. La razón era la explosiva actitud de mi madre. Ha soportado por 39 años esta amargada vida donde hay amor y afecto cuando ella lo siente y hay un silencio envolvente con un ambiente tenso cuando a mamá le da la gana.

Lo medite muchas veces, estoy completamente seguro que así seria nuestra relación si es que la hubiese (Porque si, así te veo, no como un capricho de gusto pasajero o mera atracción física)... ¿Y sabes que es lo que pienso?
Que el amor que debo pulir es exactamente como Dios lo aprueba; Todo lo soporta, todo lo cree, todo lo espera.
Si para conocer el verdadero amor en mí tuviese que pasar por lo mismo que papá a pasado, lo haría.... Pues no espero a que cambies, eso no puedo exigirlo, pero yo si, puedo ser un hombre más tolerante y más paciente de lo que creo que ya he sido. Si ese es el caso, supongo que te amaría con tus complejos y pocas virtudes. Solo que estas marchitando ese amor con cada juego del "acércate un espacio y espera dos".
Estas jugando con mi sentir solo por desquite a tus fallos anteriores, pienso que me estas culpando inconscientemente por tus fracasos anteriores. Incluso me tratabas como basura desechable cada vez que el remordimiento te copaba y digo "me tratabas" porque si no te lo digo poniéndole un frenesí a la situación me seguirías tratando así. Pero no sé qué tanto haya durado el cambio, pues otra vez estoy flotando en el espacio perdido sin tiempo ni ubicación, sin fecha ni lugar, esperando no sé qué.
Puedo esperar, pero deberás ser tú quien deba tomarme de la mano y llevarme a una cita, si tu orgullo es tan grande como para no hacer eso, lo entenderé, lo respetaré, pero yo no volveré, no por orgullo, sino por esperanza, pues soy solo un alfil, solo me queda esperar mi turno después que hagas el tuyo.

No me hagas sentirme una roca, éramos estrellas que alumbrábamos en una noche de oscuridad y lluvia solo con nuestra presencia. No permitas que esos caprichos apaguen la luz de quien venga a ti ahora, elijo no ser parte del juego, elijo que no juegues nunca más con este amor. 


                                                                                                                                      (19.05.15)

No hay comentarios:

Publicar un comentario