Gato Mirón · Lluvia Intermitente · ¡Repeat Days!

Conocí a un gato que conocía a otro que conocía a otro que conocía a otro.
El primero nunca mas lo vi después de aquella lluvia de la cual se escabullía, el segundo venia frecuentemente a casa por alimento que le daba mi papá, el tercero pues... solo vi una vez.. y el cuarto... pfff... este gato es raro.

Me desperté como siempre a la hora de siempre, tarde como siempre.
El día, pues.... igual que los anteriores... calor.
Mire por la ventana del baño mientras orinaba tranquilamente cuando vi al gato en el techo de al frente. Me miraba.

- Degenerado.- Pensé enseguida.
El no contesto. La verdad no me explico como podía estar en el techo siendo que hacia un calor estrepitoso. No estaba bajo ninguna sombra y estaba echado, descansando. Algo completamente inusual en los felinos.

Al salir de casa me despedí e iba saliendo cuando me lo vuelvo a encontrar, pero esta vez el gato estaba echado en la sombra, justo al costado interior del portón, sobre las hojas amontonadas.

- ¿Y tú quien eres, eh?
No, no contestó.

Tome una rama y comencé a fastidiarle la cola. Maulló molesto pero ni se le noto el esfuerzo así que me acerque y lo moví con el pie, se paro, me maulló otra vez y se fue. Cerré el portón y volvió a echarse.
Me fui con ganas de darle un susto pero ya había salido.
Eso me hizo pensar en lo agobiante que han sido mis días últimamente, comienzo a detestar el trabajo en el que me encuentro.
Todos han tomado vacaciones, Anne me ha llamado solo para presumir donde ha estado y lo liberal de sus días en sus vacaciones. Clau, mi colega de turno en Pamvi, ha pasado a comprar un par de veces, se le ve mas descansada. Pedro volvió a su labor, el pan. Pero llego mas tostado y mas risueño. Se ve que la paso bien. Los jefes pues... La sita Pame no se si ha tomado vacaciones, pero es obvio que las tendrá tan pronto vuelvan los demás. Espero no extrañarla demasiado.
Jona salió de vacaciones pero estuvo trabajando en sus días libres, ayudando en la construcción de terreno de una casa. De Condor no he sabido, me he alejado por cuestiones personales de el, pero asumo que ha tenido sus libertades en el trabajo, a pesar de trabajar con chinos, no trabaja siempre como uno. Vuela como uno y a veces habla sin pausa como uno.  Aunque, a pesar de que trabaja con y como chino eso no lo absuelve de lidiar con cascarrabieses "latinas".
Su "ex-relación" es como la piedra en su zapato, y creo que te atine cuando en aquella fecha justo antes de separarse le dije solo por fastidiarlo; - Mujeres podrás encontrar muchas, pero deshacerte de la madre, será tu karma hermano. Y solté la risa mientras el freno en seco su caminar y puso cara de espanto.
Que raro sujeto condor ahora que lo pienso... hmmm ¿Estará bien? Espero que si.

Sami, mi hermano, ha terminado su contrato y mañana a primera hora viaja a no se donde con mi hermana, a unas cabañas junto a Joce y no se quien mas, no quise preguntar, la ultima vez fuimos muchos, pero... mis días son trabajo, trabajo y mas trabajo. Encima tengo que tolerar a un gato que juega con mi temperamento al verlo echado a la sombra todas las tardes que yo voy a trabajar.
Hasta Xamito y su familia salieron... y un montón de amigos mas, he recibido invitaciones y estoy cansado de dar la misma jodida respuesta. - Estoy esclavizado.

¡¡Es el colmo!!
Ese condenado gato solo se recuesta, me mira y se vuelve a echar... ¡Y no es justo!

No quiero vacaciones... Quiero renunciar!
Pero... eso llevara un mes al menos, y mañana mientras mis hermanos viajan y el gato vuelve a echarse... adivinen que... si... otra vez.
Y el domingo no es ninguna gracia como día libre, eso lo detesto.

Supongo que esta época del año es así, tedioso.
Llueve... y no puedo disfrutar ni siquiera la lluvia, porque no es gracioso salir de casa y llegar mojado al trabajo. Fuese lo contrario seria genial, como aquella vez en que salí del trabajo y cayo un mar de lluvia del cielo y a la primera esquina ya estaba empapado jajajajaja fue genial.
Sita Pame y su hija Fer insistían en que entrase al auto mas yo seguía caminando. De verdad no tuve pensado entrar al auto en ningún momento, me sentí mal que hayan insistido tanto en ir a dejarme a casa, Sita Pame siempre ha sido muy atenta y eso no me sorprendió, pues ademas ella sabia que una lluvia la disfruto cuando es lluvia a mares, pero su hija parecía preocupada, decía que me enfermaría.
No se si lo diría por reto o por preocupación, creo que lo segundo. Y eso me sorprendo, pero entendí que es de esas mujeres que manejan su propio auto a edad prematura.

Me despedí mientras seguía caminando y no les tome atención a pesar de que me seguían el paso. Llovía como pocas veces recuerdo. Cuando llegue a casa todo empapado recuerdo que un gato estaba en la leñera, cubriéndose de la lluvia, ese fue el primer gato.