Pero es la confusión en mi cabeza lo que me llevado a decir palabras tan ásperas que...
Me han convertido en el Inamigo.
Hablare de mi, no por egocentrismo, hablare de aquellas desvirtudes y torpezas que me atan como ser humano incrédulo y poco consciente.
No se la verdad cómo tratar afectivamente a las personas a quienes considero amigables.
En vez de tratar con palabras honestas y transparentes, solo digo cosas espontáneas burlonas que considero bromas un poco oscuras, pero... he añadido groserías y garabatos que repugnan...
¿Cómo? No tengo idea. Hasta para mí ha sido demasiado agrio.
No entiendo como fue que llegue a hablar tan descomunalmente, si hasta 1° medio no dije una sola grosería... Bueno, luego de eso aparecieron "compañeros" que me trataron como un bicho raro por no decir las palabrotas que ellos decían, eran despectivos y pesados.
Fuí un imbecil al rebajarme a su jodido nivel, pero aunque hoy lo critique, eso no quita las palabrotas de mi boca. No tiene mucho caso.
Habia recordado a una amiga de infancia ya hace algún tiempo atrás con solo haber conocido a Yenny, que es una colega de trabajo muy risueña por cierto, me recordó a Alma, aquella chica que siempre andaba con esquelas.
Lo valore bastante y hasta eso se ha borrado de mi mente debido al dilema de sentirme Inamigo.
Queriendo ser algun dia un buen amigo o compañero, terminé por representarme como el maldito desbocado que intento no ser.
Se qué he dicho y el daño que he causado con esas palabras, y de eso es de lo que quiero escribir.
Era una broma oscura y ni siquiera lo habia previsto como un insulto, pero si... La verdad es que despues de haberlo dicho guarde un largo y ahogado silencio en mi garganta.
Me di cuenta que no insulte con una broma oscura a una colega, sino a una familia entera, me di cuenta de ello cuando alguien me percato esa palabra que me identifica... No lo de inamigo.
Sino lo de Maldito.
Si, a pesar de que lo haya escrito o no para mi, hice de ese comentario que ella publicó en su algo mío, para darme cuenta de mis propias palabras y asumirlas.
Esas que disparo sin pensar, como mamá lo hacia en mi infancia.
Aunque claro, no viene al caso, no tiene ninguna conexión con los eventos que yo he causado.
No me cuesta pedir disculpas, pero pedirlas seria hipocresía mía a estas alturas. Sé que sería lo mas sensato, pero esta es mi manera de ofrecer mis disculpas a tres personas indirectamente...
Yenny, Jorge... Y a su pequeño por venir.
No pido tregua ni cruce de palabras, quisiera que me siguieran viendo como lo que soy... Un lóbrego. Así no haré daño otra vez. Mantendré lejos de persona. Y pediré por ellos con todo mi corazón.
La razón es que no me cuesta perdonar a las personas por hacerme un mal, pero jamás me he perdonado a mi mismo el hacer daño a otros, eso me es intolerable, no me lo permito, ni me lo perdono. Es por eso que me alejo de quienes amo cuando hago daño, por que tengo así conciencia de lo que otros prefieren disimular o aparentar. Asumo lo que he provocado y aunque las acciones hablan mas que uno mismo... Jamas fue mi intención decir algo que se sintiera tan mal.
Lo lamento, de verdad.
Tengo claro que las disculpas se ofrecen de frente, pero solo pido disculpas escrita cuando miro a los ojos de una persona y ésta esquiva la mirada, así como yo también lo hago, ese es ejemplo claro de que alguien ha hecho algo malo, justo como ahora, que vamos de regreso a Temuco desde Valdivia.
No puedo mirarle a los ojos por mi vergüenza a Yenny que va a solo dos asientos delante.
No es orgullo u otra fanfarronada de un alter ego... Solo es verguenza.
Lo siento muchísimo enanita.
Prometo que en tu por venir familia no volverás a escuchar idioteces como aquella, ni ninguna palabra mas que salga de mi boca excepto de trabajo.
Cuidense mucho y sean felices como lo que son... Una familia esplendorosa y trabajadora.
Causa y Efecto lóbrego;
- El Inamigo. -
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