miércoles, 1 de mayo de 2019

Siento Ser . . . · Cor Captivum · ¡Lejos de un Vivir!

"Wait time for no one"

Soy un recuerdo de 25 años.  No tengo nada que ofrecer salvo un par de palabras.
De todas las cosas que he aprendido la mas importante… el amor por la vida, nunca fue mi fuerte. La amistad no se me da. No logro ser lo que otros quisieran y tampoco busco ser algo para mi mismo. Soy una persona enteramente vacía, insuficiente y con cero aptitudes para encajar con otras personas.

Siento que muchos me miran con lástima por la manera en que vivo. Quizá muchos se han dado cuenta que tras esas palabras parlanchinas que salen de mi boca… hay una persona miserable.

La última semana me la pase lejos de la ciudad. En un lugar muy lejos de casa.
En un lugar donde encontré la oscuridad y el silencio que necesitaba….
En ese lugar, falto de luces, encontré mi voz…

Siempre quise ser pasajero para el resto. Por que a todas las personas que conocí y amé… Las termine hiriendo.
Merezco esta clase de vida, no es autocompasión. Es solo el karma tocando mi puerta…. Y este soy yo… aceptando los golpes.

Siento que no merezco mirar a ciertas personas a la cara.
Siento alejarme de todos, como lo hacía en la época escolar…
Ame a muchas personas, de las cuales… unas fueron mas inteligentes y se alejaron.
Otras quizá no comprendieron por qué me aleje yo.
No merezco tu amistad, ni tu atención.
Si cruzas la calle y te topas con cualquier tipo de personas…
Si te das un segundo para conocer a esa persona…
Entenderás que cualquiera, en cualquier esquina, es mejor de lo que yo.

Nunca pude quererme. Ni un poco.
Solo tengo 25 y soy drogadicto…
Apenas un cristiano intentando hallar un pedazo de cielo… En medio del infierno.
He mentido mucho a mis padres.
He fallado a mis mejores amigos.
Amando… merecí ser desechado.
No deseo vivir otro día, pero siempre me termino levantando.
No por mi propia fuerza, por resignación.

Soy débil. Patricio tenía razón, nunca sabré lo que es sentir ganar una batalla o una pelea. Eso es por que nunca estuve dispuesto a entrar en una. Nunca sabré lo que significa lograr algo o alcanzar algo grandioso. Siempre admire a las personas valientes y esforzadas, siempre quise ser como ellos. Pero siempre fui insuficiente.
Desde pequeño me sentí miserable, siempre dudando de mi. Cuestionándolo todo.

Hernán me dijo que no diera tanta importancia a ciertas cosas que no debía, pero descubrí que existen cosas que me importan demasiado como para ignorarlas, pero justo aquellas cosas que mas me importan, son las que no puedo tener conmigo… Por que fui demasiado miserable como para permanecerlo a mi lado.

Mi nombre posee dos significados… Uno es “Príncipe”; lo anterior a un Rey.
Pero toda mi vida me sentí peor que un plebeyo, un simple pueblerino agolpado entre el vicio y la basura.
No logré quererme.
No conseguí perdonarme.
No pude dejar de odiarme por haber fallado tanto.
El otro significado es… “Hombre que ha visto a Dios”.
Juro… Con toda mi vida… que lo busque de día y de noche.
Pero cada vez que me ensuciaba… menos le encontraba.
Se alejó de mí, por que en mi miseria me sumergía y me alejaba de Él.
No me respondía… porque gemía criticándole, no pidiéndole.
Y nunca lo vi… Por que busque donde solo había fango y mugre.

Se que exiges “eso” de mi que yo pienso que no puedo darte…
Y me aferro a morir aún después de que Tú diste tu vida por mi.
Me revuelco entre la basura y las porquerías viciosas de la noche, porque no comprendí a qué te referías cuando decías que en Ti encontraría la Paz.
No comprendí lo que significaba cuando me dijiste que entre tanto tormento Tú me devolverías la calma. Nunca comprendí tu Bienaventuranza.
Me partía llorando con motivo des ilusorio a raíz de mi mismo, y cuando en ti pensaba… Rogaba a la muerte que me diera una oportunidad de partir.
Pero tampoco escucho… Me aferre a vivir sin saber porque….
Y eso hacía que poco a poco me hiriera la razón.

Siento que el decir que No, no hiere mas que decir que Si a la oscuridad, por que a la larga, ésta, te absorbe el alma. Dime que Tú si me entiendes…
Que comprendes esta inconsolable desesperación.
Puede que hoy no te sienta. Puede que hoy deje de ser amigo.
Puede que hoy termine.
Pero no puedo evitar recordar las veces en que si te sentí a mi lado.
Cuando Hernán soportaba mi asquerosa compañía y me aconsejaba entre historias del recuerdo, hallando en esas palabras una respuesta madura.
O cuando Carla me golpeó tan fuerte por la insensibilidad que yo demostraba ante el fallecimiento de su querido padre… Para luego romper el llanto a costa de mis brazos, como cuán polluelo bajo las alas.
O cuando Jonathan dijo que se marcharía y mi corazón tornó grisáceo y triste. Y se quedó tanto tiempo conmigo que, sentí que nunca marcharía aún después de haberlo dicho. Como cuando Paola pago todas mis desdichadas cuentas y de ello jamás me cobró un miserable peso… Como cuando Pamela dijo aquellas palabras que me devolvieron la vida, cuando yo solo pensaba en quitármela.
Nunca pude despedirme de Mamita… Nunca pude decirle que fui un completo fracaso de humano. El amor que me enseño lo practique por años, pero cada vez que lo hacía, mas sufría, y creo que aunque no me lo dijo, ella sabía que así sería.
Y me pregunto… Donde encuentro las armas.
Para no rendirme, para ser valiente, para no morir sin poder al menos ser amigo útil por una vez. Ser un hijo digno… ser Cristiano. No avergonzar a Cristo.


Si me perdonaras… Si tan solo… Tuvieras compasión de mi.

18.08.2017.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario